Unseen Sights
Hace unos cuantos meses me pasó algo un tanto extraño. Acabábamos de ver Yo, Robot (creo) cuando, saliendo de la sala, detrás de nosotros salía un tipo y una señora con el pelo cano. Me quedé mirando, casi girando la cabeza, por alguna razón me pareció muy curioso que una señora de unos sesenta años saliera de ver una película de acción
Quiero aclarar que cuando me quedo mirando a alguien es por la más simple y pura de las curiosidades. No soy como esa gente que se queda mirando a los borrachos con desprecio, a mi me guía la misma curiosidad que podría tener un niño de 4 años (curiosidad por desconocimiento). Bien, pues allí estaba yo siguiéndoles con la mirada a medida que nos sobrepasaban. Entonces me di cuenta de algo en lo que nunca había reparado
Pensé en que si yo mismo me estuviera viendo mientras observaba a la señora, mi impresión, seguramente, no sería buena. No me parecería que al otro yo le guiara una sana curiosidad. Pero no sólo eso, nunca había pensado en que alguien me pudiese estar mirando a mí. Podría decirse que siempre me había sentido como una voz en off, como uno de esos personajes de serie que hablan directamente a la cámara mientras se congela el instante. A ellos nunca les ve nadie hacer eso, y yo nunca había pensado que me pudiera pasar. Realmente no sé si alguna vez me ha pasado, pero supongo que sería improbable que no
Es muy interesante ver las reacciones de la gente en una conversación, unos sutiles gestos y expresiones que, mirando a los ojos, desvelan lo que realmente se está pensando. Por eso a veces me quedo mirando a otras personas. Cuando la gente piensa que nadie la mira, no esconde esos gestos. Del mismo modo que yo nunca pensé que pudiera ser visto y nunca pensé en apartar la mirada del extraño
Y mientras escribo me pregunto si alguien, no sólo un yo ficticio, habrá podido malinterpretar mis miradas; o si le habrán podido incomodar. E incluso si yo, sin saberlo, me habré quedado mirando a alguien que sabía que estaba siendo observado…
Etiquetas: reflexiones
2 Comments:
Una de las razones por las que nunca veo a nadie por la calle, aparte de mi natural caraja, es porque me gusta ir mirando a todos. Me pasa lo mismo en el autobús cuando no voy durmiendo.
Pero no suelo centrar la vista en alguien, sino que observo a varios. me encanta. Y si escucho música apropiada, es aún mejor.
Seguro que esa música apropiada es la de Benny Hill :P
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